Cortijo La Viñuela - Pitres, Granada

marina V.

Un sitio mágico y distinto a todos los que yo habia estado anteriormente, aporta tranquilidad absoluta. El mejor sitio para desconectar de todo. Nosotros estuvimos en la casita estudio, muy limpia, acogedora y con todo lo necesario, la decoración muy cuidada y la cama muy cómoda. Esther la propietaria es fabulosa y te hace sentir como en casa nada más verte. Y que decir de la segunda dueña Yama, la perrita del cortijo que sale a pasear contigo mostrándote el caminó, me enamoró!!! Volveré seguro...

AEMUGR

Sencillamente perfecto todo. Esther, la dueña, es encantadora y lo tiene todo muy cuidado. El diseño de las casas es precioso, no falta un detalle, está todo muy limpio y son muy acogedoras. Es un lugar ideal para descansar y conectar con la naturaleza en pareja, con amigos, con niños...la ubicación es ideal, apartado pero cerca de los pueblecitos preciosos.

Loles D. L. T.

Una experiencia inolvidable, Esther , la dueña, te hace sentir como en casa, es un encanto, las casas de ensueño, el entorno impresionante, encuentras paz, es un lugar maravilloso, lo recomiendo al cien x cien.
Gracias Esther, y muchos besos a Enzo y Tasio y a tu hermana y para tí muchos más.

Guillermo G.

No sé si alguna vez he estado en un lugar tan bonito. Sinceramente, es una maravilla de sitio. Es tranquilo, se respira paz, las casitas están con mucho mimo decoradas, fuera abunda la naturaleza.
Esther, la dueña, es muy discreta y en absoluto invasiva (como pone en otros comentarios).
Desde el cortijo se pueden hacer muchas rutas a pie por las cercanías. A nosotros nos acompañó la perrita del cortijo, Yama, y nos enseñó los caminos. Un amor…
Lo que más nos gustó fue encender la chimenea por la noche, abrir una botella de vino y preparar una tabla de quesos o embutidos en nuestro saloncito…
Por cierto, hay una especie de tienda en el cortijo para comprar lo más indispensable, pero recomiendo hacer la compra en un supermercado en algún pueblo de alrededor.
En conclusión, 5 estrellas porque no se pueden dar más. Ha sido un auténtico sueño poder estar ahí y disfrutarlo.

Marta O.

El lugar idílico, precioso tanto exteriores como la decoración y limpieza de las casas, perfecto para desconectar. Pero tengo que poner valoración negativa, por várias razones. La primera razón es que la casa está anunciada en varias webs y esta puesta como alojamiento que se permiten mascotas, mi sorpresa fue que cuando avisé a la dueña de nuestra llegada le informé que también nos acompañaba nuestra perrita y me dijo que no se permiten mascotas un día antes de nuestro viaje, cuando unos conocidos míos estuvieron antes que yo y llevaron a su galgo, sin problema. Moví cielo y tierra( un día antes) para no llevar a mi perrita 😿, mi sorpresa fue que allí hay una perrita adorable que es de la finca y que está por las casas incluso se mete dentro de las casas si te descuidas (no nos importo que la perrita Yama hiciera eso pero si me resultó chocante la situación de ella sí, la nuestra no)
Por otro lado el alojamiento más grande que es el que alquilamos, está pensando para siete personas con sus camas correspondientes, pero una de las camas individualidades es tipo supletoria y tiene un colchón durísimo, o si se le puede llamar colchón. He de decir que el resto de la casa impecable de limpieza.
Por otro lado los consumibles de la casa tanto papel higiénico, lava platos bolsas de basura o no había o solo ponía lo justo para que compres en la tienda que tiene con productos básicos a precio de oro, y no te queda mucha opción porque el pueblo tienes que coger el coche o si vas en fin de semana te lo encuentra cerra el supermercado del pueblo. Último cosa que es para reseñar como punto negativo fue la leña, en todas las casa rurales que he estado la leña estaba incluida en el precio ya que es un servicio de calefacción en invierno, aquí en la Viñuela ni siquiera te ofrecía un primer cubo de leña gratis, al contrario tenías que ir a comprar los a la tiendecita a 9 euros un cubo que daba solo para una carga de la chimenea. Me parece un robo, porque se el valor que tiene esa leña. Pero claro no nos quedó otra opción que comprar leña, para tener ambientada la casa.
Por último la dueña es un poco introvertida, no da sensación de que eres bien recibida, nos dió más esa sensación de buen recibimiento con sus amigos que estaban allí pasando el fin de semana, se unieron a charlar y disfrutar de unos vinos en la zona de barbacoa, los chicos muy amables.
Si volviera a este alojamiento sería por el lugar y enclave idílico y bien cuidado los exteriores y la perrita Yama un encanto.

esperanza R.

Casa acogedora, con encanto, comoda, limpia, amplia. En un paraje natural, precioso, idílico. Para disfrutar de unos días en familia o con los amigos.bien comunicada. Lo mejor el enclave tan natural y la perrita q te indica y acompaña por las rutas de senderismo. Recomendable cien x cien.

Debla L.

Un sitio encantador, muy cuidado y bonito.
Son un cojunto de alojamientos en plena Alpujarra granadina. Las casas son acogedoras y bien equipadas. Todo muy limpio y cuidando todos los detalles.La decoración de las casas es estupenda.

Las zonas comunes son estupendas. Tienen huerto ecológico, un gallinero, piscina, zona de relax, barbacoa y horno de leña. Hay una alberca con peces y tortugas.

Disponen de una tienda ecológica donde comprar determinados productos o por si se te ha olvidado llevar algo.

La dueña muy amable y servicial, siempre dispuesta a echar una mano en lo que necesites.

Sin lugar a dudas un lugar recomendable que volveremos a visitar.

Rafael G.

Un lugar encantador donde descansar y desconectar la mente, solos, en pareja, o en familia, todo está muy bien equipado. La anfitriona encantadora.