Hotel Cosmopol - Laredo, Cantabria

Cristina D.

Fin de semana de lo más agradable. El hotel sin ser de "última generación " estuvo perfecto. En una ubicación espléndida.
Restaurante donde se aprecia la eficacia y buen hacer del personal, con una carta cuidada y variada.
Destacar, en general, la amabilidad y buen trato, desde el gerente ( Simón) hasta el último trabajador.
Experiencia que esperamos volver a repetir.

Yvette G.

Hemos pasado una semana maravillosa en media pensión. Todo ha estado perfecto, el personal ha sido súper amable y eficiente. La habitación con terraza y espaciosa, los colchones prácticamente nuevos. Las almohadas mullidas aunque algo planas para mi gusto pero no fue problema porque pedí otra almohada más y me la dieron sin problemas al momento desde la recepción. El baño estaba bien equipado y con un secador de pelo potente que ya quisieran en muchos hoteles de 5 estrellas.||La comida o cena (podíamos elegir cada día) era el mismo menú para la gente que venía de la calle al restaurante, y nos gustó lo que había todos los días, por su calidad y variedad. Ya habíamos estado hace años en el restaurante y sigue en la misma línea de calidad y cantidad. Aparte del menú del día también tenían jornadas orientales, del cachopo.... Volveremos seguro a probarlas.||El desayuno buffet también fue variado y con un amplio horario hasta las 11.00 ideal para los que nos gusta desayunar tarde. ||En definitiva, fue una semana ideal y seguro que volveremos y lo recomendaremos a todo el mundo. |Gracias por todo!

Veinticinco M. P.

Durante mi reciente estancia en el Hotel Cosmopol en Laredo, tuve el privilegio de alojarme en una habitación que ofrecía vistas panorámicas al mar Cantábrico y a la playa de la Salvé. La amplitud de la habitación, junto con su decoración sencilla y funcional, proporcionó un ambiente acogedor y relajante. La limpieza era impecable, lo que añadía una sensación de confort adicional.

La ubicación del hotel es inmejorable, situado frente a la playa y a pocos pasos del casco antiguo de Laredo, lo que facilita el acceso a diversas actividades y lugares de interés. Además, el hotel cuenta con una piscina exterior de agua dulce y una cafetería con terraza, ideales para relajarse después de un día explorando la zona.

El restaurante del hotel ofrece una selección de platos locales, destacando los pescados y mariscos del Cantábrico, que pude degustar durante mi estancia. La calidad de la comida y el servicio fueron excelentes, complementando la experiencia general.

Aunque el hotel presenta una estructura clásica, las instalaciones están bien mantenidas y el ambiente general es muy agradable. La relación calidad-precio es adecuada, considerando la ubicación privilegiada y la calidad del servicio ofrecido.

Mención especial merece Natalia, la recepcionista, cuyo trato fue absolutamente excepcional. Desde la preparación de la estancia hasta la atención durante la misma, su nivel de profesionalidad, amabilidad y personalización del servicio es algo que rara vez se encuentra, incluso en grandes cadenas hoteleras. Su dedicación hizo que la experiencia fuera aún más especial.

En resumen, mi estancia en el Hotel Cosmopol fue excepcional, superando mis expectativas en varios aspectos. La combinación de una habitación con vistas impresionantes, un servicio al cliente de alta calidad y una ubicación estratégica hacen de este hotel una opción altamente recomendable para quienes visiten Laredo.

La única cuestión, y no es algo que pueda reprochar al hotel, es la recomendación del transportista para seguir dos etapas del Camino de Santiago. En principio, una en bicicleta y otra con transporte. Luego me di cuenta de que el promedio habitual para el traslado de equipaje en el Camino es de ocho euros por etapa, es decir, 16 euros en total. Sin embargo, me recomendaron a Alejandro, quien me cobró 65 euros, justificándolo con que “era por ser yo” y afirmando que normalmente cobraba 75 euros. Un auténtico abuso por parte de Alejandro. Lo menciono para que, si alguien tenía pensado contratar sus servicios, lo tenga en cuenta y busque otras opciones.

#HotelCosmopol #Laredo #AtenciónExcepcional #VistasEspectaculares #ExperienciaInolvidable

Wander43856520706

Al hacer la reserva pregunté específicamente si era adaptado para personas en silla de ruedas, me dijeron que si, rampa en curva la cual no puede subir una silla de ruedas sin ayuda, para entrar otra rampa tb muy empinada, para llegar al ascensor tb una rampa complicada, en las habitaciones hay ducha pero las puertas muy estrechas, y baño mínimo en la que no se puede no hacer el giro hotel en absoluto adaptado, se ofrecen en recepción a cada vez que quieras entrar y salí te ayudan, pero como hacen sentir a la persona que bastante tiene con ir sentado en una silla que solo para entrar en un hotel “adaptado” te tienen que ayudar Nada recomendable , tuvimos que buscar otro sitio donde dormir x q no entraba x la puerta del baño.

Loli P.

Hemos estado un grupo de 24 personas para celebrar San Valentín y muy bien.
El trato de todo el personal excelente super atentos.
La cena muy bien y con un detalle para las mujeres , hemos tenido una rosa roja que es un detalle precioso.

Cantabro 9.

Fuimos a cenar un menú cerrado en noche vieja el menú era una basura un plato de entrantes para una familia entera, plato de entrantes tenía aspecto de llevar 2/3 días hecho, el rape pasado, el solomillo incomible… y para rematar las uvas las comimos pasadas las 12… entre plato y plato te daba tiempo a hacer la digestión… en resumen una decepción absoluta.
Lo único bueno era la música.

Beatriz S.

La verdad es que no he estado en este hotel. En este momento iba a hacer una reserva y me ha dado por leer alguna opinión sobre el mismo. Ya no voy a hacerla, pero lo que me ha disuadido no son las opiniones vertidas, más o menos amablemente escritas. Lo que me impide realmente reservar en su hotel es la respuesta que ustedes dan a la última opinión. Los hoteles muestran su profesionalidad y su altura, al margen del número de estrellas, por su capacidad de encaje de las críticas y por sus respuestas mesuradas y amables. No se atraen clientes dando tortazos, ni mostrando pataletas. Al menos no a mí. Las cerraduras y el aire acondicionado no me interesan. La educación y siempre un necesario buen tono al cliente es imprescindible. Quizá la actualización ha de ser en las formas, más adecuadas con el aire nostálgico vintage que quieren publicitar.

Brenda G. V.

IMPRESIONANTE. Tanto la cafetería, como el restaurante como el hotel. Trato inmejorable de todo el personal. Cafetería con muchas opciones tanto para desayunar, como para comer algún plato combinado. En cuanto al restaurante, la calidad de la comida es impresionante. Para repetir una y otra vez. Con una ubicación inmejorable al lado de la playa y un trato cercano y familiar.